Ese acercamiento de la mujer que vuelve y produce, incluso antes de llegar, una evocación de todos esos detalles que hacen maravilloso ese contacto
Te acercaras y entrarás aquí de nuevo.
Sentiré el calor de tu aliento en mi oído,
cuando me susurres palabras de amor.
Sentiré el roce de tus mejillas en las mías,
cuando estémos abrazados muy juntos,
el olor dulce de tu cuello y de tus cabellos,
cuando apoye mi cabeza en tus hombros,
lo suave de tu pecho apoyado con el mío,
cuando se mueve con tu respiración,
sentiré esa delicada piel de durazno,
cuando acaricie tu espalda con mi mano,
llegando a recorrer montañas y valles,
mientras descubro tu cuerpo poco a poco,
hasta llegar a perderme en las depresiones
uniéndome a ti en un solo ser
en el que se pierden las fronteras
y se pierden las definiciones
Te acercaras y entrarás aquí de nuevo.
Sentiré el calor de tu aliento en mi oído,
cuando me susurres palabras de amor.
Sentiré el roce de tus mejillas en las mías,
cuando estémos abrazados muy juntos,
el olor dulce de tu cuello y de tus cabellos,
cuando apoye mi cabeza en tus hombros,
lo suave de tu pecho apoyado con el mío,
cuando se mueve con tu respiración,
sentiré esa delicada piel de durazno,
cuando acaricie tu espalda con mi mano,
llegando a recorrer montañas y valles,
mientras descubro tu cuerpo poco a poco,
hasta llegar a perderme en las depresiones
uniéndome a ti en un solo ser
en el que se pierden las fronteras
y se pierden las definiciones
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